Estáis en Gipuzkoa. Lo sabréis por el olor a parrillada de pescado fresco, por las huellas que dejaron los romanos 2000 años atrás, por un pueblo de cuyos pintxos se enamoró el New York Times y por otro que parece Venecia pero está encerrado en un fiordo. Sí, estáis en Gipuzkoa, en la tierra de la famosa Bella Easo y esa playa de La Concha por la que todos suspiran.