El pescado, procedente de la costa vasca o de los lejanos caladeros que explotan desde hace siglos los arrantzales (pescadores vascos), es la estrella de la cocina vasca. La merluza, el besugo, el bonito y el bacalao, preparados de diversas formas, son la base del recetario del pescado, en el que no faltan ejemplares más humildes como las sardinas o las anchoas u otras especies como el verdel.