Arte y Cultura
Patrimonio cultural
El casco antiguo de Pasai Donibane (San Juan) se extiende en torno a una única calle. Comienza en el barrio Bizkaia y continúa hasta la cala de Alabortza. Las calles adoquinadas y estrechas conforman un entorno realmente acogedor.
Comenzando por el barrio de Bizkaia podremos admirar la Casa Platain, un edificio aparentemente del s.XVI construido en sillería y entramado de ladrillo. Conserva un interesante alero de piedra tallada y una galería abierta al jardín contiguo. La casa adyacente es del siglo XVIII, de sobria fachada de sillería e interesantes alero y balconadas; es un típico ejemplo de construcción entre medianeras en un solar profundo y estrecho. A continuación nos adentraremos en la calle Donibane.
Paseando por esta zona, nos encontraremos con curiosos pasadizos debajo de las casas que delimitan sectores urbanos. Además, existen multitud de edificios de gran interés que llamarán nuestra atención. Al inicio de nuestro paseo nos encontramos con la iglesia parroquial de San Juan, que tiene planta de cruz latina y está construida con piedra sillar arenisca. Frente a la Iglesia Parroquial además nos encontramos con el palacio Arizabalo, actual ayuntamiento y que constituye una de las construcciones más importantes del lugar.
El Palacio puede datarse en el s. XVII, y es de estilo barroco. Es un hermoso edificio de planta sensiblemente cuadrada con cubierta a cuatro aguas. La fachada principal posee una composición simétrica, y en el centro aparece un hermoso escudo donde aparecen dos torres.
Asimismo, multitud de casas adornan las calles del casco antiguo. Están clasificadas por números y cada una de ellas posee características que llaman la atención. Del s. XVI es la Casa Miranda, de estilo renacentista. Se trata de un edificio de planta rectangular y cubierta a tres aguas. Consta de planta baja y tres alturas. Destaca en su acceso las dos columnas semiempotradas en el muro, y sobre las cuales hay un escudo. Uno de ellos corresponde al linaje de San Millán de Zizurkil y el otro, aunque muy deteriorado, puede ser el de los Villaviciosa. Y anexa a esta casa se encuentra la popular casa Gaviria conocida mejor como Casa Victor Hugo. Esta casa típica de Pasaia, con acceso directo a la Bahía, fue construida en el s. XVII, y en ella se alojó Victor Hugo durante su estancia en Pasaia en 1843.
Saliendo de esta casa y atravesando otro arco llegaremos al embarcadero, frente al cual nos encontramos el Humilladero de la Piedad, formado por dos columnas de piedra con el fuste cilíndrico y bellos capiteles manieristas. En su interior se haya un altar y, sobre él, una imagen constituida por una cruz y la Imagen de Ntra. Sra. de la Piedad. Este humilladero se puede considerar de estilo popular renacentista. Desde fechas remotas, hacia el siglo XVI, los pasaitarras solían celebrar, en este lugar, una memoria alegrada con los instrumentos típicos de nuestra tierra, el txistu y el tamboril.
Junto a este humilladero además se levanta majestuosamente el Palacio Villaviciosa, magnífica casa renacentista del siglo XVI, con los muros de piedra sillar bien labrada. En la fachada principal de este bello edificio hay una placa conmemorativa de la salida del Marqués de Lafayette, en 1777, hacia la guerra de la independencia americana. Al pie del humilladero parten unas escaleras que ascienden hacia la ermita de Santa Ana, construcción que, desde un altozano, vigila la entrada del puerto y la bahía. Aunque no se tienen muchos datos sobre su origen, se sabe que fue reconstruida en 1758. En su interior alberga la imagen de Santa Ana que fue adquirida en Flandes en 1573, y llevada por mar hasta Pasaia.
Descendiendo de nuevo las escaleras volveremos a atravesar otro arco que nos conducirá hacia la plaza de Santiago donde admiraremos una larga fila de casas, estrechas y altas de arquitectura popular y marinera. Estas casas, que pueden ser de tres, cuatro y cinco plantas, tienen balcones corridos que ocupan toda la fachada, normalmente con barandillas de madera y pintadas, al igual que la carpintería, de diferentes colores.
Entre ellas reaparece el edificio de la antigua Casa Consistorial que data del año 1735 y es de estilo barroco. De planta rectangular y con cubierta a dos aguas, es un tipo de construcción que no responde plenamente al de los edificios de los ayuntamientos vascos que ofrecen grandes arcos.
Saliendo de esta plaza nos toparemos con la Basílica del Santo Cristo de Bonanza, primera parroquia de Pasai Donibane (San Juan), en el siglo XVII, y estuvo bajo la advocación de San Juan de la Ribera. En la fachada Oeste del Templo existe una puerta denominada "Lintxua". Era utilizada como refugio los días de mal tiempo, durante la espera de los pesqueros o mercantes. Presenta una serie de incisiones o tallas que representan diversos tipos de embarcaciones.
Sus siluetas son la mayoría del siglo XVIII y algunas del XIX. El diseño del retablo del altar mayor es de un discreto barroco. En el centro del altar mayor resalta el Santo Cristo de Bonanza, que por su rubicunda cabellera delata su origen inglés. Probablemente sea obra de Jerónimo Larrea (siglo XVII).
Continuando el camino, antes de llegar al final de la ruta, encontramos el Castillo de Santa Isabel, fortaleza construida en 1621 para proteger el puerto de Pasaia. Estas ruinas a las que hoy llaman Castillo Santa Isabel fueron mandadas construir por el emperador Carlos I para proteger el puerto de los posibles ataques de navíos de guerra extranjeros o de piratas que se movían en las proximidades de este pueblo.
Debemos resaltar que toda esta zona mira hacia la bahía de Pasaia, y es habitual ver la llegada y salida de embarcaciones. Por otra parte, los montes Ulia y Jaizkibel se encargan de abrigar la zona.
Casco antiguo