Aduna

El verde es el color predominante en los alrededores de este pequeño municipio de Gipuzkoa. Aduna está rodeada de bellos montes y prados en los que se pueden realizar rutas de senderismo.

Podemos ascender, por ejemplo, al monte Belkoain (488 m) y observar las huellas de los primeros habitantes de la zona, como el dolmen que se halla en la cima. Además, divisaremos desde lo alto unas estupendas panorámicas de los municipios adyacentes.

Al entrar en la plaza de la localidad, nos encontraremos con la iglesia de Nuestra Señora de la Asunción. Posee interesantes elementos que merecen ser contemplados, entre los que destacan los altares y el pórtico. Por otra parte, también tenemos la oportunidad de visitar el ayuntamiento y la casa torre solariega, de gran relevancia. En medio de la plaza, nos toparemos con un espléndido frontón cubierto, idóneo para realizar todo tipo de deportes.

Tradición sidrera

Por otro lado, los turistas que decidan conocer Aduna podrán visitar alguna de las sidrerías del entorno. Se trata de un lugar con gran tradición en lo que a la sidra se refiere, por lo que son muchos los que se acercan hasta aquí para disfrutar de tan delicioso caldo acompañado del típico menú de sidrería: tortilla de bacalao, bacalao frito con pimientos verdes, chuleta a la brasa y queso con membrillo y nueces.